The Eye Must Travel
A blog for design inspiration and exploration. We journey through the vibrant worlds of art, architecture, fashion, and interior design, uncovering the stories and creativity behind some of the most captivating visual experiences. I want to share the things I love. Join me as we travel through color, form, and style and get ready to see design through a new lens.
El territorio donde tu marca tiene voz
¿Te has dado cuenta de que todas las marcas parecen decir lo mismo? Usan las mismas paletas, los mismos filtros, las mismas frases inspiracionales y hashtags reciclados. Se suman a cualquier tendencia o causa “cool” sin detenerse a pensar si de verdad les pertenece.
El precio del significado
Hace unos días, un robo en el Louvre nos recordó que el valor no siempre está en lo que cuesta. Alguien se llevó joyas, pero lo que realmente desapareció fue el relato que las hacía únicas. Nos obsesiona el brillo, olvidando que nada vale por sí mismo. Porque el oro sin historia es solo metal. Y el lujo —como el arte o la identidad— solo existe cuando tiene una narrativa que lo sostenga.
El éxito de la noche a la mañana tarda 15 años
Escuché a alguien decir hace poco que Bandalos Chinos era “una banda que tuvo éxito de la noche a la mañana”. Yo los escucho desde el 2016 —cuando mi hermano me los mostró con su EP En el aire—, y sabía que esa “noche” había durado más de una década.
Apostarle al futuro: en qué invertir aunque ese futuro nunca llegue
No es que soñar esté mal; lo necesitamos. Pero no todos los sueños merecen inversión real. Hay cosas que parecen seguras y al final no tienen retorno, y hay otras que, aunque cambie la vida, siempre se convierten en capital ganado.
El ego no paga facturas: 6 formas en que puede costarte tu negocio
Todos hemos estado ahí: esa vocecita interna que dice “yo puedo solo”, “mi marca es distinta” o “nadie lo hace como yo”. El ego nos protege, nos da seguridad y hasta puede impulsarnos a defender lo que vale nuestro trabajo. Pero cuando se convierte en piloto automático… termina costándonos caro.
5 errores comunes que le cuestan caro a tu marca y negocio.
En más de 16 años trabajando en comunicación, diseño y marketing he tenido la suerte de moverme entre distintos rubros y fases del negocio. Y aunque estos tres mundos parecen lo mismo, en realidad son músculos distintos que juntos sostienen una marca.
Ni reels ni likes: la publicidad no nació en TikTok
Digital no es el centro del universo. Es solo una herramienta más dentro de la publicidad y la comunicación. Y mientras todos se obsesionan con el reel, olvidamos lo básico: entender al consumidor, lo que desea, lo que repite, lo que no cambia aunque cambien las plataformas.
La trampa del “algún día”: por qué posponer tu estrategia te sale más caro
En el mundo de los negocios hay una frase que se repite como un mantra: “Ya lo veremos después”. Después de crecer. Después de vender más. Después de que haya tiempo.
El problema es que ese “algún día” casi nunca llega. Y mientras tanto, tu marca paga la factura.
Gen Z officially has bad taste — and it’s brilliant
Ugly on purpose, sad on the feed, and spiritually glittery: welcome to the new aesthetic order.
Let’s face it. A new wave of aesthetic standards has taken over, and it’s not here to please your mom, your design professor, or even your inner minimalist.
What’s really holding your brand back — and it’s not your logo
Most brands that come to Capitol Circle don’t need a new logo.
They need clarity, coherence, and direction.
Yes, good design helps. But if what’s underneath is messy, disconnected, or half-baked, a rebrand will only give you prettier confusion.
No era un plan, era una forma de volver: así nació Capitol Circle
Volví de DC sin saber qué quería. Solo sabía que algo en mí se había reconectado. Lo demás fue una cadena de decisiones intuitivas, clientes inesperados y una pared con un mapa.
Capitol Circle no nació con un business plan ni con un pitch deck. Nació con el corazón cansado pero con la necesidad de volver a crear desde un lugar distinto.
The Soft Power of a Work in Progress
Sometimes ideas arrive in the quietest moments—on a random Tuesday when I’m calm enough to notice them. They don’t wait until I’m sitting at my desk, though that is where I prefer to be. My office is my refuge, a place where I can lay out the words like small offerings. But more often than I’d like to admit, I end up writing on my phone, collecting sentences before they slip away.